La aventura y desaventura a Covadonga

Tras el mal sabor de boca en la Gran Ruta Celta, al no poder completarla, llevaba unos días con ganas de hacer algo diferente.

La semana pasada, uno de mis amiguetes realizó la ruta a Covadonga andando. Luisón es un chaval que está iniciándose en esto del deporte, con operación de rodilla. De momento, está más de postureo en el gimnasio que otra cosa pero bueno... vamos a darle un voto de confianza. El no es de caminar nada, y yo la verdad tenía mis dudas de que llegara a su meta, pero llegó. Llegó y aunque para muchos no crean que es algo excesivamente complicado, él se superó a sí mismo y venció su guerra particular. Para mí son las victorias que más saboreas, las que te ganas a tí mismo.

En BTT Repechín se acerca la clásica peregrinación a Covadonga ( o desperegrinación como el año pasado jeje) y este mes se estuvieron barajando posibilidades y tracks alternativos. Entre ellos, uno que iba por el Fario y la Campa con bastante desnivel. Pues bien, la azaña del amiguete, unido al mal sabor de boca dejado de la Gran Ruta Celta y las ganas de ver este recorrido a Covadonga por el Fario dieron color a una ida: "Voy a hacer una ruta circular a Covadonga".

Me puse a investigar los tracks y decidí ir por la ruta del Garrapiellu clásica y volver por la ruta que pasaba por el fario. Sumándolo todo quedaba una ruta de unos 175km y 4500m+ sobre el papel aunque me dije "Seguro que no ye tanto y ta mal medido...".

Naaa salgo a las ocho de la mañana, preparo unos bocatas y listo pensé. El día anterior se torció un pelín la cosa pues era el cumpleaños de mi amigo y compañero de aventuras JandrinWeb.

Al final retraseme un poco en la salida y comencé sobre la ocho y media. 4 barritas, 2 geles, 3 plátanos y un minibocata era el avituallamiento portátil que llevaba para toda la ruta jeje. Bueno y si me veía muy apurao, tirar de los caramelos que esperaba comprar en Covadonga jeje.

El primer "incidente" fue subiendo la Cruz de Peón, un tramo demasiado técnico para mí me hizo descabalgar sobre una zanja. Nada de excesiva importancia, un golpe en la espinilla y poco más.

El tiempo era ideal para andar en bici, sin excesivo calor, sin mucho viento... El día iba pasando tranquilamente mientras me iba acercando a mi primer hito: Covadonga. La pasada por Anayo, lugar donde solemos comer los repechinos en la ruta fue un toque psicológico pues me quedaban nada más y nada menos que 130 km para llegar a casa jajajaj

Después de la reflexión continue ruta. En Llames de Parres paré a rellenar el bidón y a comer una barrita. Breve parada pues tovía me quedaban muchos km de ruta... Seguí anvanzando en la ruta y poco a poco me vi en Cangas ya camino de Covadonga. Kilómetros que siempre me recordarán a la media maratón que corrí por esa carretera hace años... Pues naaa! Primer Objetivo cumplido!

Solo me quedaban unos 90km y 2500m+ para llegar a casa y tenía ya las piernas algo cansadas jaja... Paré a comer el bocata y a tomar una cocacola, mientras pensaba en la liada en la que me había metido. Pero naa, una vez comido, compré los caramelos de rigor y otra vez a despedalear lo pedaleado.

La vuelta, hasta antes de lo que sería subir a Anayo fue lo mismo que la ida, luego tomé dirección a infiesto en unas laaaaargas subidas por carretera que se hacían interminables, sin sitios donde coger agua... Menos mal que llevaba un par de geles q si no...
Al pasar por Torazo, se me iluminaron los ojos! Un bar!! Un bar!! menos mal porque estaba con el bidón prácticamente vacío. Buahhh como me prestó esa cocacola... me hubiera quedado sentado toda la tarde en esa terraza.

El tiempo corría en mi contra, así que había que ponerse de nuevo en ruta que aún me quedaban 50 km aproximadamente... La verdad es que tenían ya las patas echando humo y todavía me quedaba bastante que subir... Siguiendo subiendo por carreteras llegué por fin a una zona de caleya, que me hizo la subida más amena. A la derecha veía Villaviciosa y el convento de Valdedios y más o menos me situé por dónde andaba. Poco a poco llegué a la gasolinera de la Campa, a partir de aquí ya sabía lo que me quedaba... Me cagüen la leche con la subida hasta la Fumarea... debí llegar con la cara como un zombie de Walking Dead. Por lo menos ya veía las antenas de mi último hito "El Fario". Aquí casi todo ya lo subí con el San36 pues no tenía fuerzas de naaaaa. Peeero lo conseguí!!!!!

Ahora ya sólo quedaba bajar!!! Pues naaa foto para el recuerdo, traguín de agua y para abajo! Poco a poco fui llegando a la ciudad. La subida del puente de Carlos Marx y el Natahoyo me parecieron la subida al Angliru pero ya taba todo hecho =)

Un ruta muy larga pero que me hizo abrir hueco pa comer que el finde tocaba fartura de la buena pues se casaba mi hermana jejeje

Nada más, ahora a pensar en la siguiente.

Esta entrada quiero dedicársela a la seguidora más fiel de mi blog, Inma (o como yo la llamo Bilma) que tuve el placer de coincidir con ella este fin de semana pasado. Va por tí Bilma, espero que nos veamos pronto de nuevo y que yo siga contando historias para no dormir por aquí, pues será buena señal jeje. Besitos!!!

Muchas Gracias
Dani Linux

Soplao 2015 (Parte 2): Mientras la cabeza diga Sí no hay problema

Llegué al avituallamiento del Moral. Rellené el bidón, me puse la chaqueta y para abajo. La verdad es que arriba el tiempo estaba bastante frío, pero este año no quería que me pasara lo del año pasao y metí la chaqueta de invierno en la mochila para afrontar las largas bajadas.

La bajada del moral es bastante sencilla aunque peligrosa porque es muy larga y los descuidos son frecuentes. Aquí me adelantó Jandrin Web que bajaba como un misil.

Tras pedalear unos km picando para arriba, llegamos al avituallamiento de Bárcena Mayor. Aquí nos reunimos todos los integrantes de la expedición del viernes salvo Janjun que había salido unos minutos antes. Intenté seguir con mi rutina de sandwich, platano pero esta vez tomé de postre un gel. Algo que a mi estómago no le gustó nada y que hizo que me acompañaran unas ganas tremendas de vomitar las horas siguientes.

Con el estómago algo tocado, comencé el interminable ascenso hasta Cruz de Fuentes. Este es el punto más crítico de la prueba y me crucé con gente muy muy fastididada. Yo puse el pilóto automático, plato mediano y piñón grande, cabeza para abajo, música y a subir!. Una hora y media pedaleando hasta que visualicé a lo lejos la ansiada cruz que diferencia la cumbre. Los últimos metros fueron acompasados por ánimos y gritos de la gente conscientes de la dureza de la subida.

Al llegar solte la bici, me senté un momento en el prao mientras recuperaba el aliento. Una chica me cogió el bidón, me lo rellenó y me acercó una bebída isotónica mientras me decía "Tranquilo, no te levantes. Guarda energías que ya queda poco". Pegué un trago al Powerade pero vi que todavía tenía el estómago KO. Necesitaba llegar a Ozcava y tomar una cocacola que sabía que me iba a sentir mejor.


Me puse la chaqueta y al subir 200 metros se me subió el isquio derecho, para calmar el dolor aproveché una pedalada pa estirarlo peeeero se me subió el otro por lo que no tuve más remedió que parar y estirar un poco. Al volver a subir a la bici y volver a pedalear me volvió a pasar lo mismo pero en vez de parar seguí pedaleando a un ritmo más suave y poco a poco fue pasando el dolor...

Ahora quedaba una ligera bajada antes de empezar a subir a Ozcava. La bajada estaba muy muy delicada. Había gente de la organización atendiendo a algún descabalgao. Al acabar la bajada y volver a subir.... Otra vez los puñeteros isquios... Paré estiré, metí el San 36 como dice Willy y poco a poco llegué a Ozcava. Ahora ya el estómago parecía que había mejorado bastante. Tomé una cocacola, un par de pastelitos y para abajo!!! Aquí, controlé un poco el tiempo y sabía que lo hiba a tener fastidiao para bajar de las 12 horas. Pero bueno, por otro lado sabía que si había subido hasta allí ya tenía hecho el Soplao casi seguro. Así que para abajoooo!

La primera parte había sitios bastante delicados y peligrosos pues se cogía mucha velocidad. El año pasado fue mi peor momento por el frío pero este año me prestó muchísimo la bajada. Sobre todo porque tenía las patas como dos sogas colgando del culo ya y así descansaba algo jjeje.

Tras la bajada, llegamos a la carretera general y de ahí a Correpoco. Paré un segundo a quitarme la chaqueta y una pareja reconoció el maillot de repechín. Al parecer eran amigos del compi Dani, el sobrino de Pedro Tx. Me dieron un donnete que me supo a gloria. Que majos!

Ahora tocaba una pequeño repecho que nos adentraría en el camino. La verdad, lo que me sorprendió gratamente es que lo hice casi todo montado ya que el año pasado casi todo lo realicé empujando la bici.

Había zonas bastante delicadas y pude ver alguna descabalgada también aunque la más grande la ví al salir del sendero que hay una bajada y ví una bici sóla en la carretera y un par de ciclistas incorporando a otro que no hizo la curva...

Bueno, poco a poco llegaba al punto que más me gustaba "Renedo". Esta parte final es una jodienda muy grande para una prueba así. Antes de llegar al avituallamiento te hacen subir una rampa de 200 metros con un 25%. Yo porque estaba rodeao de gente animando y pegando gritos que si no no sé si hubiera subido esta vez jeje.

En Renedo ya estaba con la batería de las piernas en rojo. Estaba agotado pero sabía que cuanto más parara peor. Así que, pastelito, cocacola y para arriba.

La subida a Negredo es desesperante pues vas haciendo 'S' con rampas de mucha pendiente. Además, la última parte está bastante rota.

La primera parte de hormigón no tuve problema. Bueno, no tuve problemas... taba muertu ya y tuve que apretar mucho los dientes pa no posar el pie (No vaya a ser que algún emisario repechinero me viera y me quitaran el maillot). En la segunda parte al tener que trabajar un poco más la trazada se me volvieron a subir los isquios y me obligaron a parar en la parte final pues no podía dar pedalada. ¡¡VENGA DANI JOER, QUE SOLO TE QUEDA UN REPECHO DE NADA Y YA TODO PARA ABAJO!! ¡¡SABES QUE MUCHA GENTE PENSABA QUE NI SI QUIERA ACABARÍAS!!

Estiré un poco, me puse la chaqueta y atacar Carmona. Tras esto, sólo quedaba bajar, pedalear 10 kilometrinos por carretera y llegar al ansiado Cabezón, 162 km y 12 horas y cuarenta minutos después de haber pasado por salida.

Lo había conseguido otra vez y había bajado el tiempo en más de una hora respecto el año pasado. No dí más, acabé vacío completamente, con las piernas destrozadas... Pero bueno, el resumen:

2 años andando en bici, 2 Soplaos y 2 acabaos. #Ahoravasylotuiteas

Cuando llegué allí estaba las incondicionales repechinas Dolo y Daisy. Por la cara con la que me miraron debía dar bastante pena porque me dijeron, siéntate come algo que ya te llevamos la bici para la furgo jajaja y Fin de la aventura.

Este año fue muy diferente al año pasado, preparé la carrera en apenas un mes pero el objetivo me volvió a valer para coger el ritmo y poder volver disfrutar con mis compis de BTT Repechín por las caleyas, que ye lo que me gusta.

Quiero agradecer a todo el mundo que me apoyó antes, durante y después de la carrera. Esto era algo muy importante para mí y me sentí muy arropado, Muchos Besacos para tod@s! ;)

Animo a todo el mundo a realizar un Soplao, uno por lo menos. El año que viene Willy ya está medio convencido para venir y yo no lo dejaré solo, por supuesto :) (Tienen que venir Willyjote y Linuxpanza, seguro q ya empezó hasta la crónica jaja)

Y por último felicitar a todos mis compis: Sergio, Janjun, Dany, Elías, Jandrín, Ricardo, Fidel y como no, a la vieja guardia repechinera Carlos, Pedro y Piti con los que espero compartir nivel algún día jeje

Muchas Gracias
Nos vemos en las Caleyas

Soplao 2015 (Parte 1): Actitud vs Aptitud

Al igual que me pasó el año anterior, llevo un rato pensando como empezar esta crónica. Este año, empecé muy tarde a preparar la prueba y, además, tenía el objetivo de mejorar considerablemente el tiempo del año pasado. Como todo en la vida, cada acción a realizar necesita aptitud (capacitad para hacer algo) y actitud (estado de ánimo para enfrentarse a un problema). Dos conceptos que se suman y que pueden equilibrar uno la falta del otro.

 
Quizás este año no estaba tan apto como el año pasado, pero a mí, la actitud para enfrentarme a este tipo de metas está forjada a fuego. Y ¿Cómo? ¿Cuándo? Pues desde niño, entrenando a karate, frases como las siguientes han sido repetidas una y otra vez a lo largo de mi vida junto con unos compañeros que no permitían que te escaquearas pues los veías sufrir a cada uno como el que más:

- Venga lo último y nos vamos!
- Rápido que hay mucho que hacer y poco tiempo!
- Ahora no podemos parar que son las planchas que valen!
- Si para uno, empezamos otra vez!
- Con Kime!
- Venga que es lo último!
- No podemos parar ahora!

Sacrificio y voluntad que te darán ese punto extra cuando falta la aptitud. O como dice mi señora madre "Hace más el que quiere que el que puede"
 

Bueno y sin más filosofía, este año el Soplao se presentaba jodido. Aunque me veía muy fuerte en distancias normales, se que me faltaba bastante fondo, me sobraba algún kg aunque bajé bastante... Pero bueno para allí que fuimos y con ganas de darlo todo, de quedar vacío.

Yo me acoplé a la expedición de Janjun, Jandrín, Elías, Dany, Sergio y Fidel. Dormimos ya la noche del viernes. Pedro, Piti y Carlos vendrían desde Gijón en el día.

Temprano sonó el despertador. Yo estaba ya despierto desde las 04:30, desperté a mis compis poniendo a tope Eye Of The Tiger, comunmente comonocida como la canción de Rocky. De la emoción me puse hasta hacer planches en la habitación jeje... Fidel flipó un poco aunque ya sabe que me falta una patatina para el kilo.

A las 07:00 estábamos casi en la salida cuando vimos la marea de bicicletas que teníamos delante y que, una vez arrancara la carrera, tardamos 15 minutos en pasar por salida :S Los primeros km a penas se avanzaba pues había mucho atasco en la salida...

El primer objetivo era llegar a la cima del Soplao en el tiempo del año pasado (2h:35), para recuperar todo lo perdido en los primeros kilómetros de la prueba. En cuanto empezó a desatascarse la cosa empecé a apretar y llegué a cima a las 2h:25, no estaba nada mal viendo la salida y la verdad es que me encontraba muy fuerte. Un trocito de sandwich, un plátano para el maillot para comer luego, recargar el bidón y a fuego a bajar a Celis.

La bajada a Celis me pareció mucho más fácil que el año pasado. Si que hice un tiempo parecido pero no bajaba tan vendido y la disfrute mucho más. Bueno, ahora empezaba la prueba de verdad. Me puse los cascos y tras el asfalto de Puente Nansa tocaba subir el Monte AA. La gente como no, animando sin parar. Yo aquí me crecí un poco al ver como alguno empujaba su Cannondale o Spezialized, de esas que cuestan como cuatro veces mi bici, mientras les pedía que por favor me abrieran paso para poder pasar sin bajarme :P

Tras la bajada al Monte AA, llegaba el atasco esperado en el puente de Ruente. 15 minutinos que aproveché para responder los teleánimos que me llegaban desde Asturias mediante pensamientos =) y dar feedback a mis compis de BTT Repechín que taban nerviosos ya con las apuestas que tenían cruzadas.

Ahora, para lo que quedaba iba a pasar de ver mirar referencias con respecto al año pasado, iba a guiarme de mis sensaciones y a esforzarme lo máximo. Eso sí, a minimizar las paradas.

Cogí lo básico en el avituallamiento y a subir el Moral. Seguía teniendo muy buenas sensaciones así que cada vez iba apretando un poco más. Muscularmente me veía muy bien aunque la capacidad aeróbica no estaba muy allá, así que gran parte del recorrido la hice sin sentarme en el sillín para equilibrar.

El puñetero puerto ese desanima a uno, cuando crees que va a acabar empiezas a ver varios niveles de ciclistas en las colinas cercanas, no se acaba nunca!

Poco a poco, alcancé la cima del Moral tras los casi 12km en 1h:15 de pedaleo todo para arriba! Rellenar el bidón, poner la chaqueta y para abajo.

La cosa pintaba muy bien. Sabía que estaba bajando bastante tiempo respecto al año pasado y eso me animaba aún más si cabía...

To Be Continued....

Ruta a Ciegas 2015: Ante la duda la cuesta más dura

Ya quedan menos de dos semanas! Hay que ir cerrando el grifo de entrenar a fuego e ir pensando en mantener el tono. Al igual que hice el año pasado, a dos semanas del Soplao, quería hacer la Ruta a Ciegas. Una ruta larga, de unos 100km, con subidas largas y bastante desnivel.

Este año, La convocatoria para la ruta cuajó en BTT Repechín lo que produjo que, al margen de la calidad de la ruta, se pedaleara con la mejor compañía que se puede tener: "Los Repechinos"

A las 09:00 nos citamos en Cuatro caminos Peter Stone, Mani, Pedro TX (que estrenaba su nueva montura. Bienvenido al múndo de las rígidas!!), Piraguas, Willy, YLQH y servidor. Además, nos acompañaron dos amiguetes Dany y Abel que quería hacer una ruta larga de cara a su primer Soplao.

Cogimos dirección a la senda y en un pis pas ya estábamos subiendo Pinzales y Peña Ferruz. El ritmo de la grupeta era bastante alegre. Obviamente, como siempre hacemos, dándonos cera unos a otros.

Cogimos la pista que nos llevaría a La Fresneda, una pista entretenida sobre todo en este sentido que picaba para abajo. Cruzamos Lugones y pasamos por delante del portalín que nos sirvió de refugio en nuestra última incursión a Oviedo ante la lluvia. Hala, ahora sólo quedan 6km de subida hasta coronar el Pico Paisano comúnmente conocido como El Naranco.

Cada uno a su ritmo, pero yo quería evaluarme a ver qué tal estaba. Cuando empezamos con el primer trozo de hormigón, yo me veía que me costaba más de lo normal para ir con casi todo metido... Al rato me fijo y estaba subiendo con el plato mediano!!! Bueno, reconozco que eso fue un golpe de moral. Seguí subiendo bastante bien y me junté con Peter. Con la presión de que no se escapara e intentar seguirlo hubo tramos que creía que me iban a saltar los muelles del pulsómetro jeje.

La ascensión muy dura pero guapa. Cuando llegamos arriba, Abel ya había llegado y al poco empezaron a llegar el resto de compañeros.

Aquí, Pedro TX y Piraguas, regresearon a a Gijón. El resto, comimos algo y comenzamos el descenso hasta el Río Nora. Un descenso marcado por una primera parte más cerrada  (que variamos un poco respecto al track original) hasta, posteriormente, llegar a las pistas que nos llevarían a la carretera. Una vez en ella, bajaríamos por un sendero hasta llegar al río.

Tras pedalear paralelamente un río, lo cruzamos y seguimos ruta entre tramos de carretera y otros de camino. Los bidones estaban prácticamente vacíos y nos centramos en buscar algún sitio donde repostar. Hacía bastante calor y no queríamos pasar otra vez por lo que pasamos en la Rivoira o en la anterior Suprema.

Al llegar a Tuernes El Grande encontramos un parque con fuente, ideal para hidratarse, rellenar bidones y comer una barrita.

Con las pilas totalmente cargadas (obviamanente es coña que ya llevábamos 60 km de ruta) tomamos carretera para comenzar, al poco tiempo, la larga a subida al Gorfolí. La verdad es que no es una subida con excesiva pendiente aunque se hace larga de narices. 50 minutos de ascensión y llegamos a las ansiadas antenas que marcaban la cima.

Ahora quedaba ya una entretenida bajada, dónde mi compi YLQH, resurgió de sus cenizas y le devolvió la ostia al Tío del Mazo porque menuda forma de bajar por las trialeras...
Aunque era cuesta abajo, todavía hubo que subir algún repecho por Molleda (que yo creo que podíamos haberlo evitao pero que el Sargento lo puso en el track por algo...). Cruzamos Las Vegas, Los Campos y llegamos al Embalse de Trasona donde tenían competición o sabe dios que, pero había más gente que en la feria de muestras el día de la Caja de Ahorros. Allí aprovechamos para descansar un pokitín y nutrirnos un poco.

Ya llevábamos 90 km aproximadamente pero sólo quedaban un par de repechos que subir, el primero en Trasona para llegar a Cancienes y el segundo que nos llevaría a la senda de Guimarán.

Tras cruzar la senda y llegar a Veriña, llevar más de 100km y 2700m de desnivel en las patas había dos opciones para acabar la ruta.

• Opción A: Puenteseco.
• Opción B: Cuesta de Veriña.

¿Que somos?
Repechinos 

¿Y que decimos?
¡Ante la duda la cuesta más dura!

Pues a subir la cuesta de Veriña por supuesto.

Que orgullo pedalear con estos compis como ayudan a que uno se sacrifique sólo por ver al compañero.
Espero que tanto Dany como Abel cumplan sus objetivos en su primera visita al Soplao también. Un placer haber pedaleado con vosotros ;)

La verdad es que tuve muy pero que muy buenas sensaciones. Evité forzar mucho, por si acaso la patuca que me lleva molestando unas semanas se resentía, pero la verdad que me sentí muy a gusto. Esta vez no vino el Mazo del Tío jajaja



Un abrazo y hasta la próxima!!

Semana de barro y lluvia #SoplaoIsComing

Comenzamos el mes de Mayo, ya no queda nada para el 23 y volver al Valle del Cabuérniga para participar en el Infierno Cantabro de nuevo. Este año empecé muy tarde y me está costando volver a coger el ritmo necesario. A parte, este año hay aliciente!!  Un cachopo que me va a pagar  mi amigo el Sargento Playu si lo hago en menos de 12 horas =)

La verdad es que esta semana me he encontrado muy bien ya, el jueves tocó mojarse bastante pues empezó a llover en cuanto salí. Aún así, ruta de 51km - 1320 m+ en 3 horas y media.

Hoy por la mañana quería hacer una ruta algo más larga. Me pareció buena idea cambiar un poco el chip y decidí tirar hasta el Gorfolí y volver por el Monte Areo. Muy buena ruta, con zonas complicadillas por el barro, a pesar de alguna lluvia intermitente.

La ruta fue una pasada, eso sí no me crucé con nadie en unas dos horas. En el Gorfolí había una niebla que costaba ver a más de 5 metros. Pero mereció la pena, silencio y tranquilidad para desconectar de todo. Una semana de mucho barro en las caleyas pero muy fructífera

Y ahora toca la calentura de la semana. Por si fuera poco el Soplao, me he apuntado a la primera edición de la Gran Ruta Celta.  Una ruta con salida y llegada a Santiago de Compostela de 180 km y 4000 metros+ para el 6 de Junio. Acojonado me hayo... Pero... ¿Quién dijo miedo habiendo hospitales?

De momento 91 inscritos. Supongo que a lo largo del mes de Mayo se apuntará bastante gente más.
Da un poco de respecto puesto que son 180 Km y no parece que sea un perfil tan rodador como el del Soplao. Os dejo un vídeo promocional de la prueba para acabar.

Salu2
Soplao Is Coming!!!!

Sábado de bocata por Ribadesella y alrededores

Este sábado tocó rutina de bocadillo. Una ruta para poder disfrutar de la bici, olvidándose de que el tiempo se te echa encima y disfrutar de la naturaleza.

El destino elegido fue Ribadesella y sus alrededores aprovechando el track de los Montes del Sella, que se celebró la semana pasada. Una rutina de 52km y 1850m+ que, por lo que había oído, era una pasada.

Willy, mi compi de BTT Repechín, estuvo negociando el BonoBike toda la semana y le dieron el día para poder disfrutar de la ruta.

A las 08:30, con un cielo plomizo y que no prometía mucho cogimos rumbo a Ribadesella. Al llegar allí, la cosa parecía algo mejor. Se podía distinguir algún que otro claro aunque en la montaña se veía un mar de niebla bastante denso.

La primera parte de la ruta circulaba por carreteras secundarias hasta llegar a la mítica entrada a La Cuevona. Nombre derivado de su impresionante túnel natural que da acceso al poblado.

Al poco, abandonamos la carretera (por eso Turonman no quiso acompañarnos) para adentrarnos en las pistas que ascendían al Picu Moru. Una larga ascensión que nos abrió una panorámica impresionante de los Picos de Europa.

En apenas 10 km ya casi llevábamos 600 metros de desnivel jeje (propia de una ruta del Sargento). Bajamos dirección a Sinariega y en una bajada con bastante barro, que hacía difícil de controlar la inercia de la bici, me hizo chocar con la rodilla en una rama, la cual me dejó un hermoso siete en el pantalón jeje.

Cogimos la carretera en dirección a Pendas y tras unos cuantos kilómetros de subida cogimos un precioso sendero que nos llevó al pueblo de Collía. En el pueblo, estábamos buscando un sitio donde rellenar nuestros bidones cuando al asomarnos en una casa descubrimos que era un bar!! Así que, además, aprovechamos para tomar un zumito de cebada isotónico.

Tras la breve pausa continuamos para comenzar la subida más grande a la Majada del Bustaco. La primera parte, iban turnándose las pistas con rampas hormigonadas. No muy duras pero una subida bastante larga y, antes de llegar al cruce con la carretera general empezó a llover. Por lo que aprovechamos a comer el bocata atechados en unos pinos antes de comenzar la segunda parte de la ascensión. Nuestra idea inicial era comer arriba del todo para no empezar a subir con la panzada pero no pudo ser :( Así que, con la panzada tocaba subir....

Tras acabar de comer, también paró de llover. Willy comenzó empujando la bici, como si tuviera en la cabeza llegar así hasta arríba... JAAA! esperé un cachín a que avanzara un poco y yo empecé la subida montado para meterle presión y que no tuviera más remedio que hacer lo mismo. Obviamente, como buen Repechín, entro al trapo y montado para arriba.

La subida era dura, había partes bastante rotas y empinadas. Había momentos que la comida parecía que iba a salir por la boca... Lo peor, como suele ser en estos menesteres siempre es lo que está por llegar. La última rampa antes de la cima, una rampa de hormigón que casi hacía explotar al gps al calcular el porcentaje de la rampa. La verdad no sé si eran 200 o 500 metros, sólo sé que sentía que los pulmones iban a salirme por la boca y que nunca se acababa... Al final, no sin mucho esfuerzo conseguí llegar arriba y respirar por fin jeje.

Al llegar arriba la panorámica del Picu Pienzo y Fito eran impresionantes. Como suele pasar en estos casos mereció la pena el sufrimiento.

Nos pusimos en ruta después de recuperar un poco en dirección al archiconocido Mirador del Fito a través de senderos que cresteaban la sierra.

De ahí ya comenzamos un rapído descenso en dirección al mar. La primera parte bastante complicada en senderos estrechos y con mucha piedra grande suelta. Más adecuados para endureros como Jandrinweb no para Willy y para mí que no destacamos mucho en este campo jeje.

Bajamos hasta la Playa de la Vega y de ahí cogimos camino a Tereñes bordeando el mar. Al pasar Tereñes, cogimos dirección al Faro de Ribadesella donde el gps y las indicaciones de la carretera nos jugaron una mala pasada y tuvimos una momentánea pérdida de localización jeje. Menos mal que no llovía y ya estábamos al lado si no los ""asertivos"" compañeros de BTT Repechín me hubieran dado cera hasta el día del juicio final.

Tras desperdernos, cogimos la carretera para llegar a Ribadesella y culminar la ruta con una cervecina mientras disfrutábamos como comenzaba a llover sin que nos hubiera pillado en bici.

La verdad es que tuvimos un día perfecto para darle a la biela por el monte con mucha suerte con el tiempo. A ver que preparamos para la siguiente excursión =) Como siempre, un placer rutear con Willy, que ya no calla ni subiendo. Se nota la fuerza del lado oscuro en él jeje.

Hablando de lado oscuro, Turonman, vuelve a la caleya. Te echamos de menos!!


Hasta la próxima!!
Dani Linux

Excursión repechinera al Naranco

Se acerca Mayo y hay que hacer los deberes para poder disfrutar de una nueva edición del Soplao. Las salidas de La Ruta a la Marañuela o a La Suprema de Tapia fueron un toque de atención de que había que apretar el culo para llegar en condiciones a la prueba.

Todo se junta, esta semana bici al taller y dos semanas sin mi Linuxina. Menos mal que mi primo me prestó su montura y que ésta tenía ganas de guerra por el poco uso en estos dos años :P

El sábado, había un nuevo test, que permitiría a ver si va mejorando la cosa, en una ruta hasta el Naranco organizada por el Sargento.


A las 09:15 nos juntamos Willy, el Sargento, Pedro TX y servidor en cuatro caminos. Se notaba que era una ruta para la élite pues todos íbamos con bicis rígidas :)
Sin demora, nos dirigimos al Monte Areo mientras la climatología parecía que nos iba a dar una tregua por el momento. Al subir al Monte Areo, nos encontramos con con Motores y su cuñado Josete que nos acompañarían durante la bajada a Montico por sugerencia de Playu (una forma sutil de que luego tuvieran que subir de nuevo jaja)

El camino que habíamos elegido para bajar a Montico no lo pudimos tomar porque estaba impracticable por el agua así que bajamos por carretera aunque parecía jabón de lo que patinaba...
al llegar abajo, Pedro TX, Motores y Josete se despidieron y nosotros continuamos con nuestra ruta...
Desde Montico, cogimos dirección a Villabona por unos entretenidos con bastante barro. Cuando avistamos el centro penitenciario, empezamos a pedalear con cierto sigilo pues, al parecer, a Willy lo están investigando por un par de cuentas en Suiza...

 

Tras dejar el asfalto, tomamos dirección al Picu Santu Firme. Una entretenida ascensión hasta el area recreativa de la cima.

Aquí paramos a comer una barrita tras un motín al Sargento por nuestra parte. Al fondo, y muy en pequeñito, podíamos distinguir el Cristo gigante que distingue al Naranco. También pudimos ver cómo las nubes se iban acercando a nuestra ruta jeje.

Tras el tiempo justo para comer una chocolatina, cogimos la entretenida bajada hasta Llanera donde alguno estuvimos a punto de hacer la especialidad de los downhillers: Salto por encima de la bici.
Tras abandonar de nuevo el asfalto cogimos la Senda del Río Nora. La última vez que pasamos por ahí, habíamos pasado tan rápido y llovía tanto que no pudimos ni mirar para los lados.

Una senda muy amena entre árboles y paralela al río Nora que nos permitieron estirar las patucas para lo que quedaba aún por subir.

Nuestra salida de la senda fue por una empinada trialera bastante cerrada. La verdad,
 no se a que estoy esperando para atar un machete en el cuadro de la bici para cortar maleza por la frecuencia de este tipo de caminos en nuestras salidas.

Tras empujar la bici un poco comenzamos el ascenso al Picu Cuatro vientos. Una entretenida y larga subida entre piedras que desembocarían en una senda de gravilla más fácil de subir (aunque la cogimos por poco tiempo porque a nosotros nos gusta la marcha jeje)

Bueno, pues subiendo y subiendo por lo menos "EL mazo del tío" no llegaba jaja. Lo que sí parecía que iba a llegar pronto era la lluvia pues el día oscurecía por momentos.
Subiendo y subiendo llegamos a las antenas del Picu Cuatro Vientos. Un nombre muy acertado pues soplaba bastante y frío...

Tras bajar un poco nos metimos en un entretenido camino estrechín que nos permitía apreciar una panorámica de la """""Capital"""" y de nuestro destino (aunque estuviera cerca bordeamos un poco más para hacerlo más entretenido jeje).

Tras un par de subidas más por sendero llegamos a la carretera que ascendía al Naranco. Aquí teníamos pensado parar a comer pero la climatología no estaba muy por la labor de dejarnos descansar así que tras la foto de rigor, pusimos los chubasqueros y para abajo como balas.

La bajada por caleya fue muy divertida y, unido a la lluvia que empezaba a caer de lo lindo, lo hicieron aún más. En nada habíamos bajado todo el desnivel que nos había costado tanto tiempo subir jeje.
Al llegar abajo, buscamos un sitio para atecharnos y comer el bocata y encontramos un sitio amplio y cálido como puede apreciar el lector en la fotografía posterior :).

Tras comer el bocata, seguimos en ruta y, en Lugones, decidimos coger el tren y no hacer los últimos 30 km pues la lluvia no tenía pinta de irse :(

Un buen día de de caleya. Muy buen rollo y poco a poco la cosa pinta mejor de cara al Soplao aunque queda muuuucho trabajo jeje. Por lo menos esta vez no le dio tiempo a venir al Mazo del Tío. :P

Un abrazo y hasta la próxima!
Dani Linux