El verano: época de descanso, época de sol, de playa, de cerveza, de barbacoas, de excesos
alimentarios... que época tan maravillosa.
Ahora en septiembre muchos somos los que nos proponemos volver a nuestra
rutina deportiva, pero al volver a engancharse... SORPRESA: No estamos igual de
ágiles, de fuertes, de rápidos, nos fatigamos más rápido. Esto es algo normal,
el cuerpo también se adapta a las vacaciones. A la hora de retomar los
entrenamientos hay que tenerlo en cuenta, debemos acostumbrar de nuevo a
nuestro cuerpo.
No es empezar de cero, no te agobies, aunque nos hayamos llevado un chasco al haber comenzado
de nuevo, con constancia lograremos, en poco tiempo, recuperar la forma que dejamos e incluso
la mejoraremos, ya que nuestro cuerpo ha descansado también ;). Ánimo y recuerda:
Poco a poco y con paciencia. Pronto volveremos a estar a tope! De momento el comienzo no ha estado mal
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